Este hombre vende
pulseras con colores de Palestina en uno de los pocos recovecos
donde los militares le dejan estar de esa ciudad fantasma dentro de
Hebrón , durante la segunda intifada recibió balazo en el abdomen,
los colonos quemaron su casa donde murieron dos de sus hijos, no
puede subir ni bajar de donde estamos porque en ambas direcciones
están los colonos y por “seguridad” de éstos los militares
prohíben el paso a cualquier palestino, si él pasa cerca de la casa
de los “settlers” le pueden llegar a lanzar huevos y frutas.
Aquí
la situación afecta muy especialmente a los palestinos pero, también
a los israelíes, su gobierno no les deja pasar hacia la zona “A”
de Palestina, está penado con una cuantiosa multa y con el honor de
pasar a estar en la mira por haber ido del “enemigo”.
Así se vive en Palestina
y especialmente en Hebrón, si esta zona está llena de matices, esta
ciudad es la créme de la créme.
Aquí ni israelíes ni palestinos pueden hacer lo que quieran, solo
lo que el Gobierno de Israel les deje hacer.
¿Libertad?
¿Igualdad? Y, como no podía ser de otra manera, Israel es la
democracia más desarrollada de Medio Oriente (sic).
Que
caiga el muro que bloquea la visión de la gente de una vez y por
todas...
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada